martes, 15 de abril de 2008

@state.gov


Sería genial si uno pudiera atenerse a los resultados fallidos de cada promesa que hace pero, siendo tan erráticos como imperfectos, jamás lo hacemos.

Desde hace un tiempo, descubrí que ciertos artilugios de la retórica que yo tenía catalogados como "excusas" no son tan así. Y comencé a usarlos yo también (ahi fue que me volví a recibir de "grande").

Creo que en la nebulosa de mi cabeza escuchó voces pasadas dicendo: "ahora me vas a entender", refiriendose a mi nuevo status de "full time worker". Estoy segura que respondi algo así como "sí, claro", y algunas dosis de mi sarcasmo/mofa habitual.

Tengo la tendencia a creer que si uno de verdad quiere, puede seguir teniendo su rutina vacacional en dosis limitadas pero efectivas, y sin racurrir al tan mentado recurso más arriba mencionado cada dos por tres.

Pero a veces sale mal. Demasiadas veces, de hecho... Y tenes reclamos de todos los frentes, de todas las relaciones/personas que te conocen, clamando por más de tu atención y presencia. Y, una vez más, no podés con tu genio y terminas mandando a la mierda a alguno.

De un tiempo a esta parte, bff me las viene haciendo, y me las viene haciendo mal, arreglando y desarreglando planes a troche y moche.

Si cumplis con tu palabra, y realmente nos vemos el jueves, I´m gonna take it back.

If not, be afraid, be very afraid.

Payback´s a bitch.




Adios!






Campanita*

No hay comentarios: